30 de junio de 2006

Para acabar con la corrupción en la industria del disco.

La foto es del Sinatra Edition Chrysler.

Buen auto, ¿no?.

Muy mafia-look.

Y hablando de mafia, aquí hay un post muy interesante y esclarecedor acerca del triste fenómeno de la payola, escrito por Claudio Gutiérrez, periodista, productor musical y uno de los personajes vitales en el quehacer del rock chileno de la última década a través de su trabajo en el sello Alerce, y hoy en el portal La Otra Música.

Ya que el tema de la delincuencia está tan en boga, me parece bueno recordar que la práctica del soborno es una realidad terrible en la industria de la música.

Claro que ya no es generalizada porque se tomaron medidas.
El consorcio Iberoamerican Radio Chile, por ejemplo, debió reestructurar y centralizar su mecanismo de programación musical en comités abiertos, para huir de esta práctica. No se sabe si fue por hechos puntuales, o simplemente por una sana política de transparencia.

Alguna vez, en un breve lapso de honestidad brutal, contaré historias.

Dos ejemplos:
- Director que se encerraba en su oficina con los promotores radiales y salía con juguetes, botellas y viajes al poto del mundo para ver el showcase de un artista insignificante.
- Periodista que, sin motivo específico, hasta el día efectúa rondas a las oficinas de sellos discográficos, y sale de cada una con puñados importantes de discos, chucherías y/o DVD's. Y después firma con su nombre y muchos le consideran respetable.

Guac.